En épocas en las que los precios están tan inestables y la macro economía no nos favorece, necesitamos sacar el máximo provecho de nuestros ingresos. Todos notamos que el dinero no rinde como hace unos años. Pero no por esto debemos resignarnos y mucho menos endeudarnos.
Por esta razón es tan importante detenerse a pensar, hacer cálculos y tomar las riendas para que nuestro sueldo alcance. Si logramos poner en funcionamiento estas estrategias sencillas incluso podremos ahorrar aunque sea una pequeña parte de nuestros ingresos.
En esta nota, compartimos algunas estrategias básicas que podemos poner en práctica para poder organizar nuestro dinero y llegar cómodos a fin de mes.
Financiarnos de manera inteligente
Uno de los grandes errores que debemos evitar para no engendrar problemas más grandes es endeudarnos a largo plazo o con intereses altos. Cada vez que hagamos una compra significativa para nuestra economía debemos hacerla en las mejores condiciones posibles.
Solicitar un adelanto de sueldo que nos permita abonar con bajos intereses en pocas cuotas puede ser un buen recurso. Podemos pedir este adelanto de sueldo online en una financiera confiable en pocos minutos y sin más requisitos que nuestro DNI.
Anotar ingresos y gastos fijos y variables
Otro gran consejo es llevar las cuentas claras de los gastos fijos y variables de la familia. Alquiler, servicios, cuotas fijas, y un promedio de gastos en supermercado, por un lado. Gastos particulares, gastos hormiga, y de tarjeta por el otro.
Esto nos permitirá revisar si podemos reducir algún gasto fijo e identificar qué gastos específicos podemos eliminar directamente. Algunos de estos son totalmente prescindibles y evitarlos nos llevará a mejorar nuestra economía.
Procurar ahorrar siempre el mismo porcentaje del sueldo
Aunque a priori parece muy difícil, incluso en esos meses en los que necesitemos pedir un adelanto de haberes, debemos intentar ahorrar. Lo ideal es reservar entre un 10 y un 20 % de nuestro sueldo.
Esto nos permitirá contar con una reserva disponible para emergencias o bien para alcanzar objetivos concretos. Ese ahorro nos permitirá proyectar nuestro crecimiento a mediano y largo plazo.
Identificar gastos superfluos o prescindibles
Todos tenemos ciertos gastos regulares que sabemos que en realidad podríamos por lo menos reducir. Para algunos tiene que ver con salidas, para otros con pedidos frecuentes de comida con delivery, para otros indumentaria.
No es necesario eliminar completamente estos gastos que seguramente son parte de nuestras costumbres. Pero sí debemos ser conscientes de que podemos planear y limitarnos para llegar a una mejor organización general.
Organizar compras mensuales
Por último, organizar las compras mensuales, puede reducir mucho nuestros gastos fijos. En lugar de comprar día a día la comida que necesitamos, compremos en negocios con buenos precios.
Siempre es recomendable hacer este gasto a comienzo de mes. Pero aunque debamos pedir un adelanto de sueldo para esta compra, siempre es conveniente. Además nos ayudará a calcular con mayor prolijidad nuestros gastos fijos y variables. Y también a elegir los negocios más accesibles.